Este es un proyecto puede ser de gran ayuda para aquellos docentes que observan que en sus colegios hay una información distorsionadas con referencia a la sexualidad, ya que en muchos de las ocasiones de niñas embarazadas, se dan es por el no conocimientos previo de información necesaria con respecto al sexo y a otras situaciones que se presentan en el día a día.
Espero que este proyecto sea de gran ayuda y que al igual puede ayudar y orientar a muchos niños y jóvenes que en realidad lo necesitan.
Objetivos Generales:
- Promover en el individuo, la familia y la comunidad la valoración positiva de la sexualidad, la igualdad social de los géneros, la autonomía y la responsabilidad, la convivencia solidaria y tolerante y la salud sexual.
- Generar en los educadores y la comunidad reflexiones sobre sus actitudes y valores respecto a la sexualidad, incrementar su nivel de información y formación.
- Generar en los agentes educativos y comunidad reflexiones sobre sus actitudes y valores respecto a la sexualidad, incrementar su nivel de formación, promocionándolos como agentes multiplicadores en la comunidad educativa.
- Sensibilizar y concienciar a la población en general sobre los principios y valores frente al ejercicio de la sexualidad.
- Brindar información y formación acerca de factores de riesgo y control asociados a la iniciación sexual específicamente con relación al embarazo, ETS, VIH y SIDA.
- Brindar elementos que faciliten su autonomía y toma de decisiones en torno de la sexualidad.
OBJETIVOS ESPECÍFICOS:
- Propender por una Educación Sexual que nos ayude a vivir con libertad; a tomar decisiones con amor y a mantener relaciones interpersonales que contribuyan a nuestra realización.
- Fomentar en los estudiantes hábitos saludables en el campo de la vida sexual y reproductiva.
- Trabajar conjuntamente con entidades especializadas e informadas en educación sexual, de acuerdo con las problemáticas propias de los estudiantes de la Institución.
- Determinar las características de las actitudes frente a la sexualidad.
- Desarrollar estrategias que permitan la orientación de los procesos referentes a la educación de la sexualidad.
Propósito
- Valorar y entender la
sexualidad como una cosa propia
que podemos compartir libremente, que tiene implicaciones sociales y, a su
vez que puede estar relacionada con la reproducción.
- Tomar conciencia del
carácter cultural de la sexualidad,
y de la diversidad de enfoques que se dan, según las épocas, los lugares,
las religiones, las ideologías, etc.
- Tener un conocimiento de
la anatomía y la fisiología de los aparatos
genitales femenino y masculino, y relacionarlo con la conducta sexual y
sus consecuencias (embarazo, enfermedades, felicidad, placer...).
- Comprender el hecho de la
pubertad: Cambios físicos (caracteres
sexuales secundarios) y cambios
psicológicos. Captando la diversidad de ritmos de desarrollo para
cada persona.
- Identificar y diferenciar
los términos de uso
cotidiano referentes a la sexualidad y la reproducción, y saber cuales son
los términos utilizados en el lenguaje divulgativo y científico.
- Conocer y evaluar
moralmente las diferentes posibilidades
que la ciencia y la técnica médicas ponen a nuestra
disposición a fin de intervenir en la reproducción: Reproducción asistida,
contracepción e interrupción del embarazo.
- Conocer las enfermedades de transmisión
sexual más frecuentes. Tomando conciencia de la necesidad de evitar las conductas de riesgo.
- Conocer la legislación vigente relacionada
con la sexualidad (interrupción del embarazo.
- Darse cuenta de la influencia de los medios de
comunicación, la publicidad y el entorno social sobre la conducta sexual
de las personas.
- Promover la autoestima, proporcionando
elementos para apreciar y respetar el propio cuerpo y el del otro, y entender y respetar las diferencias
de aspecto físico entre las personas.
- Aprender a valorar otras cualidades en las
personas, y no únicamente su aspecto físico.
- Conseguir expresar,
argumentar, fundamentar y defender opiniones, sobre cualquier aspecto
referido a la sexualidad y la reproducción con una actitud tolerante hacia las otras personas y sus puntos de
vista
FUNDAMENTACIÓN
Respondiendo a la disposición emanada por el Ministerio de Educación
Nacional sobre Educación Sexual, la problemática dada en los diferentes cursos
y a las características específicas de los estudiantes que de acuerdo con los
diagnósticos institucionales permitieron formular el proyecto educativo “hacia
una formación sana de educación sexual”, se han venido realizando un estudio en
el cual se han desarrollado temas de acuerdo a las necesidades más sentidas de
los estudiantes y Padres de Familia.
El embarazo precoz, las enfermedades de transmisión sexual, el sida,
el abuso sexual, la autoestima son para los estudiantes temas y problemas
trascendentales que sugieren abordarlos en un enfoque integral y ante
todo con acciones preventivas para garantizar una vivencia responsable y
placentera de la sexualidad.
La
educación y la información públicas son esenciales para lograr un mejoramiento
sostenido de la salud sexual y reproductiva. Por lo tanto, las actividades
educativas también deben procurar que los hombres y las mujeres jóvenes
conozcan y ejerzan sus derechos en esta dimensión.
La
juventud, ya sea urbana o rural, al encontrarse en una etapa de formación
especialmente vulnerable dentro de su proceso vital, requiere el ofrecimiento
de estrategias educativas y de información especialmente diseñadas para ella.
Desde
el Proyecto Nacional de Educación Sexual se propusieron a nivel nacional y a
partir de la resolución 03353 de 1993, las políticas para "el desarrollo
de programas y proyectos institucionales de educación sexual en la educación
básica del país de manera consciente y responsable (no coercitiva) hombres y
mujeres decidan cual es el momento en que pueden traer hijos al mundo,
utilizando adecuamente los diversos medios de regulación de la fertilidad"
y "buscar la salud sexual de los educandos tanto física como mental".
Se
observa entonces que dentro de las políticas de educación sexual la promoción
de la salud sexual y reproductiva ocupan un lugar preponderante.
El
proyecto de educación sexual plantea la articulación de estrategias de
educación sexual como proyectos pedagógicos integrados a los proyectos
educativos institucionales cuyas características se exponen en la Ley general de educación, ley
115 del 8 de febrero de 1994.
Esto
implica que los esfuerzos mayoritarios hasta el momento actual se han dirigido
a la educación sexual de la población infantil y juvenil que se encuentra
escolarizada. Sin embargo, un porcentaje alto de la juventud colombiana no
accede a la educación formal o no permanece dentro del sistema.
Es
por ello que se hace cada vez más urgente el desarrollo de nuevas estrategias
que, manteniendo las políticas nacionales, puedan alcanzar a aquella franja
poblacional que por su edad, falta de institucionalización y vulnerabilidad,
son los más necesitados de educación sexual y de información y servicios de
salud sexual y reproductiva.
Mauricio “La juventud es el futuro del país. Por eso, su
participación e integración plena en la sociedad exige que sean capaces de
llevar su vida sexual y reproductiva en forma responsable y bien informada
mediante la educación y los servicios que satisfagan sus necesidades de
desarrollo”. Polanco Valenzuela Asesor Proyecto de Educación Sexual.
2. MARCO TEÓRICO.
La forma en que se ha vivenciado la
sexualidad en nuestro medio, no ha posibilitado el crecimiento personal,
familiar ni social en la medida en que se espera. Se ha demostrado que la
educación sexual deficiente, no planeada y la discordancia entre el hogar, la
escuela y el medio social, se asocian a múltiples problemas como la represión
sexual, la intolerancia, la violencia intrafamiliar, la desinformación y la
carencia de servicios de salud para grupos específicos.
Se considera que una de las mejores
herramientas para subsanar y superar esta situación es la educación sexual
integral, científicamente fundamentada y que promueva el mejoramiento de la
calidad de vida en hombres y mujeres en todas las etapas del ciclo vital.
Existen situaciones sociales que pueden
intervenirse en forma integral dentro de los procesos de educación sexual como
son diseñar y ejecutar acciones efectivas que logren "acabar" o
disminuir la inequidad en que se vivencian las diferencias de género y la
debilidad en los referentes de identidad.
La idea es propiciar un aumento en la
autoestima, una inteligente toma de decisiones, una práctica de valores que
permita la convivencia pacífica; en fin, el desarrollo de habilidades sociales.
Esto a su vez contribuiría considerablemente en la prevención de embarazos
precoces, el nacimiento de hijos no deseados, las altas tasas de mortalidad y
el incremento del VIH / SIDA y otras enfermedades de transmisión sexual.
2.1. Política de
salud sexual y reproductiva
El mejoramiento de la salud sexual y reproductiva (SSR) de hombres y mujeres, y
el fortalecimiento de la autonomía de la mujer, son condiciones fundamentales
para el logro de un desarrollo humano sostenible. En este sentido, Colombia ha
logrado avances sustantivos en la mejoría de varios componentes de la salud
sexual y reproductiva de su población, gracias al desarrollo de un conjunto de
políticas sociales que pretenden dar respuestas a las necesidades de la
población, a la modernización del Estado y a una transformación del Sistema
General de Salud y Seguridad Social (SGSSS), definido mediante la ley 100 y la
ley 60 de l993, que establece claramente las acciones, competencias y recursos
para cada uno de los actores y niveles comprometidos en su desarrollo, dando
cumplimiento a principios y políticas formulados en la Constitución Política
de l991. Este nuevo Sistema General de Salud y Seguridad social garantiza a
todas las personas el acceso a los servicios de promoción, protección y
recuperación de la salud sexual y reproductiva, con el propósito de mejorarla y
mantenerla en hombres y mujeres, en todas las etapas de su vida, con un enfoque
de equidad de género y desarrollo humano.
Los principales objetivos de esta política
integral, propenden por el mejoramiento de la salud sexual, la reducción de la
mortalidad materna y perinatal, de los embarazos no deseados y abortos en
adolescentes y la disminución del impacto de las enfermedades de transmisión
sexual y VIH/SIDA.
Colombia en l992 se convirtió en uno de los
pocos países latinoamericanos con un Plan Nacional para la Educación Sexual,
con un mandato estatal que obliga a los colegios públicos y privados a elaborar
planes para enseñar educación sexual a todos los estudiantes de bachillerato.
Si bien la ejecución del plan ha sido
desigual, las directrices nacionales son progresistas en tanto holísticas, pues
abarcan temas como el papel de los géneros, el embarazo en adolescentes, la
prevención del VIH/SIDA y los derechos reproductivos.
En el país persisten aún serios problemas que
afectan la salud sexual y reproductiva de la población, tales como los altos
índices de violencia contra las mujeres y niños, en especial en el área sexual
y reproductiva, las altas tasas de morbimortalidad materna y perinatal, la alta
incidencia y prevalencia de enfermedades de transmisión sexual VIH, SIDA
especialmente en la adolescencia y la juventud.
Esta situación es condicionada y agravada por
la pobreza y la marginación social, la diversidad educativa, territorial y
cultural y las necesidades de los grupos especiales (mujeres cabeza de familia,
desplazados, poblaciones indígenas y adolescentes).
Tanto el limitado acceso actual de la población
a los servicios de SSR como la adecuación de éstos a los efectos de la
transición hacia el nuevo modelo de servicios de salud, afectan y condicionan
las alternativas para solucionar los problemas y necesidades en esta área y
hacen imperativa la definición e instrumentalización de los lineamientos para
lograr una política integral de salud sexual y reproductiva.
Los métodos hormonales para las mujeres,
comenzando con los primeros anticonceptivos orales en 1960, y la elaboración
subsiguiente de dispositivos intrauterinos y la esterilización quirúrgica
moderna, condujeron al desarrollo de una comunidad de servicios de
planificación familiar centrada en la mujer, que a menudo excluye a los
hombres. El desafío de hoy, como lo expresa la Conferencia Internacional
sobre Población y Desarrollo (CIPD) celebrada en el CAIRO en l994, consiste en
aumentar la responsabilidad de los hombres en cuanto a la planificación
familiar mediante la ampliación de los servicios, de modo que se proteja la
salud de la reproducción de los hombres y de las mujeres, y el fomento de una
mayor sensibilidad en cuanto a las cuestiones de género.
Algunas personas temen que la adición de
servicios para los hombres hará que disminuyan los recursos disponibles para
las mujeres, que actualmente tienen la mayor responsabilidad en cuanto a la
planificación familiar y a otras cuestiones de salud de la reproducción.
Uno de los mayores obstáculos encontrados es
la renuencia de los hombres a usar los servicios de salud. Los hombres saben
poco acerca de su propia sexualidad o de la sexualidad de las mujeres, hay poca
comunicación respecto a la sexualidad en sus relaciones y aún subsisten muchos
mitos.
2.1.1. Salud
sexual
Es el completo estado de bienestar físico,
mental y social mas allá de la ausencia de enfermedades o dolencias, que
permite a un individuo relacionarse, sentir y expresar afecto, formar pareja,
experimentar placer y ejercer libremente su identidad sexual; contempla
dimensiones comunicativas, afectivas, placenteras y reproductivas que se
reflejan en su conducta, actitudes y prácticas frente a las diferentes
experiencias de la vida.
2.1.2. Salud
reproductiva
Es un estado general de bienestar físico,
mental, social y no de mera ausencia de enfermedades y dolencias, en todos los
aspectos relacionados con el sistema reproductivo, sus funciones y procesos.
La atención en salud sexual y reproductiva,
se define como el conjunto de métodos, técnicas y servicios que contribuyen a
la salud, al bienestar reproductivo y a evitar o resolver los problemas
relacionados.
2.1.3. Fecundidad
Según la Encuesta de Demografía y Salud - ENDS – de l995,
la fecundidad descendió casi 23% en los últimos 15 años. De mantenerse
invariables los niveles actuales de reproducción, las mujeres tendrían 3 hijos
en promedio durante toda la vida fértil.
La fecundidad de adolescentes requiere
atención preferencial por la profunda repercusión que tiene en la vida de las
jóvenes. Según la ENDS
de l955 el 17% de las mujeres de 15
a 19 años ya es madre o está embarazada de su primer
hijo: a los 19 años ya lo son 4 de cada 10 y entre ellas hay un 9% que ya tiene
por lo menos 2 hijos. La mitad de las mujeres ha tenido su primera relación
sexual antes de los 20 años, en promedio casi un año antes del establecimiento de
la primera unión.
Aunque la edad de inicio de la vida
reproductiva ha variado poco en los últimos 20 años pues la mitad de las
mujeres tienen su primer hijo antes de cumplir los 22 años, entre las mujeres
con mayor educación se observa la tendencia a retrasar la iniciación de la
maternidad.
2.1.4.
Planificación familiar
Los programas de planificación familiar deben
ofrecer a las (los) clientes el acceso a una atención de alta calidad, por
medio de una amplia gama de servicios anticonceptivos y de atención de
seguimiento por el tiempo que lo requieran.
El conocimiento de las mujeres en edad fértil
y en unión, sobre los métodos anticonceptivos en Colombia, es casi del 100%.
Los más conocidos son la píldora, el condón, la esterilización femenina y el dispositivo
intrauterino (DIU).
El 72% de las mujeres colombianas en unión
está usando anticonceptivos; la mayor prevalencia de uso se encuentra entre las
mujeres de mayor nivel educativo y las residentes en las zonas urbanas.
El mayor aumento en el uso de la
esterilización se registró entre 1990 y 1995 al pasar de 21 a 26%. También aumentó en
forma considerable el uso del condón del 2 al 4%. La píldora es usada por el
12,9% y el DIU por 11,1% de las mujeres.
2.1.5.
Enfermedades de transmisión sexual y SIDA
En la era del SIDA se ha prestado más
atención a las ETS como peligros principales para la salud de la reproducción.
Antes de la era de las ETS vírales incurables y a menudo mortales, no eran
motivo de mucha preocupación para los hombres porque las enfermedades
tradicionales solían ser asintomáticas o producían síntomas que podían tratarse
con antibióticos y no tenían secuelas visibles duraderas para los hombres.
Actualmente se sabe que algunas ETS reducen
la fertilidad masculina, ya que las infecciones pueden causar bloqueo de los
conductos deferentes o causar epididimitis, que es una inflamación de los tubos
por los que los espermatozoides se desplazan desde los testículos hasta los
conductos.
Con frecuencia, la gente no sabe o no
recuerda que la infertilidad afecta tanto a los hombres como a las mujeres.
Particularmente en los países en desarrollo, es posible que se culpe a las
mujeres e incluso que sus esposos se divorcien de ellas por la creencia de que
ellas son las únicas culpables de no tener hijos.
Los hombres fueron la única causa o un factor
contribuyente en la infertilidad de más de la mitad de las 5.800 parejas
infértiles que la OMS
estudió entre 1979 y 1984
CAPITULO DOS
MI ROL EN LA
SEXUALIDAD EDUCATIVA
Para transmitir el valor y significado
de la sexualidad en nuestros adolescentes tenemos que partir de dos conceptos
clave: qué es sexualidad y qué es educación sexual.
Muchas veces la idea que se tiene
sobre la sexualidad es estrecha y reductiva: solamente se piensa en los
genitales y la relación física. Así muchos programas “educativos” giran en
torno a la llamada “reproducción” y, en todo caso, en cómo hacer para evitar el
embarazo, como si este fuese el único problema en sexualidad. Visión tan pobre
hace que nuestros adolescentes se encuentren desconcertados ante los verdaderos
desafíos de la sexualidad.
Las preguntas de los jóvenes no son
superficiales: de las respuestas que les demos dependerán decisiones claves
para sus vidas. En esta área más que en ninguna otra se impone el criterio de
brindar herramientas para que la persona (en este caso nuestros jóvenes, hijos
y alumnos) descubra por sí misma la verdad y realice su vida en función de
ella.
Es una tarea fundamental. Pero decir por sí mismo no significa “de cualquier
forma”, como si los textos de educación sexual tuviesen que ser “manuales de
opiniones” en los que el error tiene el mismo valor que la verdad. Tenemos que
mostrarles a nuestros adolescentes el camino hacia la verdad de su sexualidad
(que es como decir el camino hacia su felicidad). De ahí que la tarea no es
enseñar “muchas cosas” sino dar elementos para que los jóvenes recorran el
camino hacia la verdad. Por eso nunca se recalcará poco que la educación sexual
es un campo en el que los docentes son colaboradores de los padres.
Conceptos en torno a la sexualidad
Sin pretender agotar el tema, queremos ubicarnos en una
perspectiva integral de la sexualidad. La sexualidad es el conjunto de aspectos que abarcan a
toda la persona humana, en la unidad de su cuerpo y de su alma espiritual, y
que la configuran como hombre o como mujer.
De aquí se
deriva una fuerza interior que está referida a la afectividad, a la capacidad
de amar y a la aptitud para relacionarse con los demás.
Es la expresión
de la totalidad de la persona. Maneras determinadas de sentir, amar y
reaccionar que, tanto en el hombre como en la mujer son distintas y
complementarias. En la sexualidad están en juego por igual tanto realidades
físicas como espirituales, el cariño como los valores.
De esta configuración tan profunda surge una energía
“misteriosa” que nos posibilita y nos hace salir de nosotros y buscar a los
demás, tanto la perspectiva del matrimonio (unión de personas en la
complementariedad) como en el resto de nuestras relaciones humanas (obviamente
cada campo con sus características).
Aspectos que abarca la sexualidad
La sexualidad tiene que ver con muchos aspectos de la
vida de las personas.
Identidad: somos persona varón o persona mujer desde
el momento de nuestra concepción. Es un dato de la naturaleza que constituye
nuestra primera riqueza.
Comunicación: tenemos maneras diferentes de expresar nuestros sentimientos e ideas. A
partir de esta diferencia complementaria se da el diálogo. En la misma
configuración de nuestro ser sexuado está la necesidad de salir de nosotros
mismos e ir en busca de los demás.
Crecimiento: partimos de los datos genéticos, de nuestra identidad y vamos
madurando. Este desarrollo está íntimamente relacionado con el de la
personalidad.
Transmisión de vida: Que la sexualidad tenga que ver con el nacimiento de otra persona
(“totalmente nueva y distinta a nosotros mismos, un ser humano que antes no
existía”), nos ubica en su profunda importancia humana y ética.
Debemos
insistir en el que podemos llamar “factor amor”: el amor es el que le da sentido a todo este conjunto, el que le
da verdadero significado a la sexualidad. Sin él no se entiende la sexualidad
humana. Por eso es necesario salir al paso de falsas interpretaciones del amor
diciendo simplemente que “amor” no es el sentimiento meloso que nos muestra la
televisión. Es la realidad espiritual que le da sentido a la vida. Es la
capacidad de salir de uno e interesarse por el bien de los demás. Es una virtud
activa y no solamente “algo que te pasa”.
En este sentido se entiende que
la educación sexual sea; (Vollmer) “todo aquello que una persona
necesita aprender (conocimiento y actitud) desde que nace y que le capacita
para llevar una vida feliz con una pareja estable y permanente”
Estos
dos conceptos se sintetizan en la frase del Prof. Lagares: “Debemos enseñar a
niños y jóvenes a conocer, ejercer y dominar su propia sexualidad, porque de lo
contrario sería aceptar que la sexualidad es un determinismo biológico que
inhiere sólo al plano genital, lo que de hecho, la ciencia y la experiencia ya
se han encargado de desmentir”
Los niños
El desarrollo de la sexualidad humana
empieza con el contacto físico, cuando los bebés son sujetos y acariciados. Eso
es necesario y natural que ocurra. No se debe privar al bebé de contactos
corporales. Es necesario reconocer al niño como ser sexuado, en relación
consigo mismo y con otros, para que se construya una identidad sexual propia.
La sexualidad infantil es una de las puertas por la cual el niño desarrolla su
personalidad y sus relaciones con la afectividad.
La sexualidad es una cosa natural en los seres humanos, una función como tantas
otras, como comer, caminar, leer, estudiar, etc. Y como tal, debe ser un tema
tratado con naturalidad, honestidad, cariño, y teniendo su propio espacio
dentro del proceso educacional del niño.
La familia
Una función importante de los padres
es hablarle a los niños acerca del amor, la intimidad y el sexo. Los padres
pueden ayudar mucho si crean una atmósfera positiva en la cual se pueda hablar
con sus hijos acerca de estos temas. Sin embargo, muchos padres evitan o
posponen esta discusión.
Los caminos que llevan al conocimiento de su propio
cuerpo, de sus sensaciones, etc., no siempre son los más adecuados para los
niños. Hoy día, las interferencias en este proceso de aprendizaje hacen con que
el niño esté, cada vez más temprano, expuesto a unas manifestaciones severas, y
en muchos casos incomprensibles, de la sexualidad.
El culto a la belleza, al físico y la seducción, en los
medios de comunicación, no distinguen la edad de su publico. Hay un abuso de
las manifestaciones sexuales, al cual los niños están indiscriminadamente
expuestos. Los contenidos sexuales pueden acelerar las manifestaciones de los
niños en el tema de la sexualidad, considerando que ellos aprenden imitando lo
que ven de sus padres, de la televisión, out-doors, de bailes y ropas eróticas
de moda, etc. Las malas influencias conceden nociones equivocadas y
perjudiciales al niño.
De una forma general lo único que puede evitar estas malas interferencias es la
familia. Son los adultos, los padres, que deben ejercer el papel de filtro de
las informaciones. Es necesario crear y mantener un canal abierto de
comunicación con los hijos, espacios de discusión e de intervención sobre lo
que es correcto y lo que no, relacionados a todos los temas, y en especial a la
sexualidad.
Es conveniente vigilar de muy cerca el entorno y
las actividades del niño, para orientarle cuando crea necesario. En la medida
de lo posible, no se debe perder ninguna oportunidad para entablar conversación
sobre sus dudas, intereses, etc.
Docentes
los docentes deben de estar capacitados para Tener capacidad y actitud para
comprender la sexualidad como una dimensión del ser humano desde una
perspectiva integral e integradora, Tener capacidad para diseñar,
planificar, ejecutar, controlar y evaluar proyectos y programas de educación
sexual que apunten a una formación integral del ser humano sobre la base
de la dignidad de la persona, Poseer Actitud investigativa que posibilite
aportar permanentemente a la cualificación de los niveles de vida de las
personas, Ejercer liderazgo en proyectos de orientación y educación sexual en
comunidades locales, regionales y nacionales y Formador en el campo de la
orientación y educación sexual.
ACTIVIDADES
·
Interacción grupal entre estudiantes y
socialización de las conclusiones elaboradas por cada grupo.
·
Desarrollo de Talleres para Docentes,
Padres de Familia y estudiantes.
·
Conferencias en la Institución y fuera
de ella.
·
Vinculación de otras instituciones
especializadas en el tema
·
Películas, presentación y análisis de
documentales.
·
Capacitación de docentes .
Estructura curricular
1-
Ejes
Los proyectos de educación sexual deben
diseñarse a través de ejes que articulen las temáticas y que se mantengan a lo
largo de su ejecución. Ellos son:
·
La persona: como ámbito de
construcción de la identidad, la ciencia, y la singularidad.
·
La pareja: como espacio
privilegiado para la construcción y vivencia de la sexualidad.
·
La familia: como núcleo
socializador primario desde donde se construye valores, actitudes, y
comportamientos sexuales.
·
La sociedad: como espacio
socializador desde donde se validan y realimenta la cultura y los valores.
Énfasis
El énfasis es la perspectiva desde la cual se
determina la pertinencia de los contenidos en cada uno de los grados,
considerando el momento evolutivo de los alumnos y sus necesidades y
inquietudes. Lo que se trabaja en un grado puede abordarse en otros, es
cuestión de dar prioridad a un determinado aspecto para cada nivel.
Consolidación de la imagen
de si mismo mediante la interiorización de los valores y actitudes del entorno.
Valoración positiva de las
características y comportamientos singulares y comportamientos singulares que
determinan que cada persona sea única y diferente.
Construcción de una
relación igualitaria, respetuosa y solidaria entre las personas, sin ningún
tipo de discriminaciones.
Conformación del desarrollo
integral propio, desarrollando la solidaridad y el compartir; aprendizaje del
dar, darse, recibir.
Fortalecimiento de la
conciencia ecológica como medio de relación armónica con el entorno. La
sexualidad como componente esencial de los procesos esenciales.
Preescolar
|
Grado 1
|
Grado 2
|
Grado 3
|
Grado 4
|
Grado 5
|
|
Identidad
|
Reconocimiento
|
Tolerancia
|
Reciprocidad
|
Vida
|
ternura
|
|
|
|
|
|
|
|
LA PERSONA
|
|
|
|
|
|
|
LA PAREJA
|
|
|
|
|
|
|
LA FAMILIA
|
|
|
|
|
|
|
LA SOCIEDAD
|
Promoción del encuentro interpersonal que reconoce la dependencia y la necesidad de contactos, cuidados y reconocimientos de si mismo y del otro.